Miro por la ventana como a mi alrededor la gente vive su vida, con todos los pros y los contras que la variedad de experiencias a la que se exponen, les genera. Y desde el banco de suplentes, yo saco apuntes, para estar preparado si alguna vez me toca. Las ganas de entrar igual se hacen sentir pero hasta que el dt no lo indique, no puedo. Es gracioso por que yo también soy el dt, que no me deja entrar. Hasta he pensado en pegarle (me) una buena piña, para que aprenda. Osea que me jacto de ser dos cosas, un mediocre y un idiota.
El hecho de saberme idiota en si, me hace menos idiota, lo cual es un respiro importante. Pero mas allá de salir de la definición de idiota, me interesa entrar en la de adolescente, que por lo que veo, estoy pifiando bastante. No me he sentido con el concepto de “los jóvenes de hoy en dia” que por lo visto, no se si es malo o bueno. Probablemente dependa del cristal con el que se lo mire. Tengo iniciativa igual, me falta un compañero, digamos que soy un robin sin batman. Y no es que no se haya dado, pero es que por h o por b, termino pasando la noche del sábado leyendo a Agatha Christie y con unas ganas bárbaras de meterme en la piel de algún personaje, y olvidarme por un rato de la realidad.
Hoy es viernes, se viene otro fin de semana. Vamos a ver si logro escapar de estas cuatro paredes, y sino, el lunes subo una foto disfrazado de Hércules Poirot